Vistas de página en total

martes, 11 de marzo de 2014

RENTA NACIONAL (RN)

Suma de las remuneraciones pagadas a los factores productivos nacionales durante un periodo determinado

Un sindicalismo auténtico mejoraría el reparto de la renta nacional

El acaparamiento desmedido de la riqueza y el concomitante incremento de la pobreza es, como toda persona informada sabe bien, un problema mundial, una grave crisis a escala planetaria que tiene su origen en el llamado fundamentalismo de mercado, es decir, en la confianza ciega de economistas y políticos poderosos en la idea de que basta el sostenido y suficiente crecimiento económico basado en la empresa privada, para que la sociedad entera reciba en automático los beneficios de ese incremento de la riqueza, para que todo mundo mejore sus niveles de bienestar y se forme un mercado vigoroso, solvente, que garantice la realización de las utilidades y la repetición ampliada del ciclo económico sin tropiezos ni desaceleraciones. Y todo este paraíso terrenal, sin otro mecanismo que la “mano invisible del mercado”, que dijera Adam Smith.
Pero los indicadores de una escandalosa concentración de la riqueza y del imparable crecimiento del número de pobres en el mundo, son pruebas irrefragables de que los milagros del libre mercado no son tales; que librado éste a sus propias leyes, lo que produce no es el bienestar colectivo, sino precisamente lo contrario: el exagerado enriquecimiento de unos pocos y la miseria de millones que se debaten en el hambre y el desempleo. De ello se sigue que la justicia social necesita, para ser una realidad, que junto con las medidas fiscales, laborales, sociales, legales y de inversión pública en beneficio de la inversión privada, se apliquen también políticas públicas cuyo propósito consciente y preciso sea el reparto equilibrado de la renta nacional, la elevación constante de los niveles de vida de los trabajadores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario